UNA DE REMORDIMIENTO


Cuando hablamos entre nosotras sobre las Navidades, siempre salen las mismas frases en todas las conversaciones: “Yo engordo 3 kilos en Navidades”, “no sé por qué tenemos que comer tanto”, “tengo una cena hoy, otra mañana y una comida pasado mañana”.

Es curioso,  las que más problemas tienen son las que más delgadas están.

Siempre estamos pensando lo mismo. ¡Comer o no comer!, esta es la cuestión.

Yo siempre me encuentro con la misma tesitura cuando terminan las Navidades, bueno en realidad me pasa durante todo el año pero ya que estamos en Navidades empiezo por ahí. Por esto me encuentro en este momento "reflexionando".

Cada vez que me subo a mi báscula, pienso si no querrá salir corriendo.


Hay que cambiar la mentalidad o la fuerza de voluntad o lo que sea, esto lo dicen los libros. ¿Hay alguien a la que le haya funcionado leer un libro de regímenes?, a mí evidentemente no. Y lo peor es que he ojeado algunos.


Es el momento de hacerse un psicoanálisis.


Veamos, esto no empieza porque sí.

Primera reflexión. Esto empieza cuando tu madre se empeña en hacer el avioncito y el cochecito, brum brum brum mientras te intenta meter, literalmente las tres últimas cucharadas de papilla que te quedan en el plato. ¡Hay que terminárselo todo todo!. El estómago empieza a ceder y nadie se entera. Ya estamos fabricando futuros problemáticos del peso.

En realidad, a mí nunca me ha hecho falta esto porque siempre he sido una niña de " muy bien comer".

Segunda reflexión. Las dietas NO se deben empezar el lunes. Las dietas deben empezarse ¡YA!.
¿Para qué vamos a esperar hasta el próximo lunes si hoy es miércoles por ejemplo?, pues muy fácil, yo te lo contesto.  Porque tenemos 4 días para atiborrarnos hasta el lunes y además nos vamos mentalizando, (lo de mentalizarse es un decir). 


Tercera reflexión. Has empezado la dieta, pero has hecho “trampas”, muy graciosa, trampas a ti misma contigo misma.
Aún así te pesas, sola, ¡pero!, INTENTAS engañar al peso para que no salga corriendo ¡y te pesas de puntillas!, ¡JA!, ¡NI POR ESAS!.


Cuarta reflexión. Creernos eso de que estando gordas estamos bien. Terrible error. Que te digan: "pero si tú estas guapísima". (Y un cuerno)

Quinta reflexión. ¡Querer crear el día de las gordas!, ¡pues no señor!. Yo quiero estar delgada, pero sin esfuerzo, ¡IMPOSIBLE!. Vale, tenemos menos arrugas pero esto tampoco funciona. (Esto también me lo han dicho).


Sexta reflexión. Pensar que por estar distraída una no va a tener hambre.

¡Pero si me he comido una tableta de chocolate estando MUY distraída!. Hombre hambre hambre no es que tenga, lo mío es gula claramente.

Séptima reflexión. La gente te dice: “lo mejor es comer en plato de postre”.
¿Qué es lo que hay que comer en plato de postre?, ¿todo?, ¿cualquier cosa?.  Es que nunca me ha quedado claro si comer en plato de postre es poder comer de todo.


Octava reflexión. El deporte ayuda. ¡Ja!.
Si, yo hago deporte del bueno, del de irme al gimnasio y estar sudando una hora la gota gorda y salir congestionada como si me fuera a dar un “flato”. ¡Si yo ágil estoy un rato!.



Eso sí, cuándo me preguntaron "peso y talla" para poder "regular" (me dijo), las máquinas con mis tablas le contesté tranquilamente al entrenador: "perdón, mi peso no lo sabe ni mi madre". Este "desparpajo" en contestar te lo proporciona la edad supongo.

Será entonces que no tengo bien "reguladas" las máquinas con mi peso, y por esto no me funciona el deporte. (No lo creo).

Novena reflexión. El problema está en “cuando llego a casa”. Supuestamente hay que cerrar la boca. Esto aún no lo he puesto en práctica. 


Y muy a pesar nuestro y por muy bonita que sea la báscula, nos tendremos que volver a pesar. ¡Ay Dios!.


Y décima y última reflexión. Pero quizás, como en el chiste que me mandaron hace poco, después de las Navidades a lo mejor me peso así y me hago mis propias ilusiones.



Y SI A PESAR DE TODO NO FUNCIONA. ¡REFLEXIÓN DEFINITIVA!

Pensaré sin ningún remordimiento que SI YO NO ME PUEDO ADELGAZAR, ¡ESPERO QUE SE ENGORDEN MIS AMIGAS!.

¿El lunes empiezo?, ya lo estoy pensando, me falta mentalizarme. Lo malo es que hoy es el día de Sto Tomás, y huele a txistorra por todas partes que te mueres.
¡CÓMO VAMOS A HACER RÉGIMEN!, ¡ES IMPOSIBLE!.

Si te ha gustado, comparte o imprime:

6 comentarios

  1. PUTO gen echeberria... lo odio

    ResponderEliminar
  2. Pero te ha gustado mi post o no?...jajaja, el que tuvo retuvo...qué le vamos a hacer.

    ResponderEliminar
  3. Siii, como siempre :)
    que buena blogera eres, tiita mia
    nos vemos en nada!! tengo ganas de family...

    ResponderEliminar
  4. ¡GANAS DA FAMILIA!, tranquila, que todo llega. Tu hermano PERDIDO, entre Heathrow y Plymouth, pobrecito, después de 6 meses de Erasmus, jajaja...le cantaremos "vuelve, a casa vuelve por Navidad"...bueno que estoy cocinando, lo que he reflexionado hoy no me ha servido de nada. BESOO

    ResponderEliminar
  5. ¡Como nos entendemos las rechonchas renegadas del mundo! ¡Te entiendo como si lo hubiera escrito yo! Me ha gustado mucho.
    Besitos guapa (¿lo de que mejor ajamonada que amojamada tampoco cuela, no?)

    ResponderEliminar
  6. Yo amojamada no quiero estar, ya te dije en una ocasión que en mi próxima vida si es que la hay, yo quiero ser "lerda", pero esas lerdas que tienen el arte de que todo el mundo les haga todo...aunque para esto también hay que valer, yo ya conozco a un par.

    ResponderEliminar

 
Copyright © decocinasytacones. Diseñado con por Las Cosas de Maite